Hoy me han soplado la friolera de diecisiete euros por hacerme dos fotos biométricas para el pasaporte. Si no fuera porque he visto el equipo digital del fotógrafo, me hubiera pensado por el precio que en realidad eran pintadas a mano, como los retratos de los antiguos maestros. Lo mejor es que al insistir en que me tenían que dejar un cerco de al menos 5 mm entre el borde de la cabeza y el resto de la foto, el hombre se ha rascado la cabeza y ha murmurado que era la primera vez que encontraba un país con más trabas burocráticas que la misma Alemania... así que ya sabéis, ¡ya somos europeos!
PS: La foto no la pienso poner porque como en todas, salgo horrible...
Crisis/Crisis
-
Este blog está sufriendo en estos momentos una crisis. Me he dado cuenta de
que no tengo tiempo para un proyecto tan ambicioso como el que quería, pero
p...
Hace 16 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario