Aunque no lo he contado hasta ahora, la semana pasada me tocó quedarme en casa de "Rodríguez" (o como quiera que se pueda denominar a la versión femenina del personaje de Forges que permanece al pie del cañón mientras la mujer y los niños se van de vacaciones). Por supuesto, la lista de todas las cosas que deseaba hacer con ese tiempo que por primera vez en muchos años era mío y sólo mío, se quedó corta, en parte porque uno de los motivos de quedarme en casa era que tenía que estudiar.
Y por supuesto, la superreunificación familiar en una estación de tren de Alemania Central el viernes, fue gloriosa. Los Supernenes no sólo se alegraron de volver a verme tanto como yo a ellos, sino que además tenían una impresionante semana de aventuras propiciadas por Superman para contarme: jardínes llenos de gnomos (verídico, una exposición entera de muñecos de barro para el jardín, que cosa tan "kitsch"), rutas por bosques otoñales llenos de hojas de colores, un molino de agua que se movía alimentado por un canal... pero sin duda, el evento estrella de la semana fue el "Sommerrodelnbahn".
Si por el maravilloso dibujo de Supergirl no sois capaces de enteraros de como va el asunto, aclaro que son circuitos de metal como las de bobsleigh pero sin hielo porque funcionan principalmente en verano. Los niños pueden subir acompañados de un adulto y los trineos tienen un sistema de frenado con el que puedes controlar más o menos la velocidad... pero SM me comentó que con mi hija había llegado a tener miedo, porque se había lanzado cuesta abajo sin apenas tocar la palanca que controla el freno. Si eso lo hubiera hecho Superboy, me habría impresionado un poco menos, pero con lo timorata que es la niña, que ha salido a su supermamá, lo cierto es que me quedé recapacitando.
El sábado me libré del tema porque llovió a cántaros, pero el domingo antes de volver a casa, cuando yo ya tenía planeada una inofensiva excursión a la "Gruta de las Hadas", un lugar a cubierto, amaneció un sol tímido y los dos Supernenes empezaron a pedir a gritos que fuéramos otra vez a la montaña. Así que una hora después, estaba sentada con SB en un cochecillo de ellos, apretando la palanca como si me fuera la vida en ello.
Cuando ya sólo nos quedaba una ronda, SG viene a mí y me dice que quiere que me tire con ella para enseñarme lo "ráaaaaapido" que se va. Y para rematar la faena suelta la condenada: "No te preocupes, mamá, que si tienes miedo, yo freno por tí". Y ya sabéis las cosas que llega a hacer una persona cuando le tocan el pundonor.
Ahí tenéis la prueba de que fuímos más rápidas de lo que detecta el ojo mecánico, ni la cámara de fotos de la atracción nos llegó a captar en nuestra vuelta de honor. Y SG iba contando encantada que conmigo había ido mucho más rápido que con SM. Por mi parte, todavía no he hecho declaraciones a la prensa, ni creo que las haga. Pero quizá sea una lección de cómo me tendría que tomar la vida de cuando en cuando, no pensar tanto en las redes de seguridad, ni en las consecuencias de mis actos... simplemente tirarme cuesta abajo y sin frenos.
Claro que después de ver lo del niño del globo en la tele, pobre Supergirl mía, es un angelito... aunque ahora resulta que creen que la cosa era un montaje, yo de los niños es que me puedo esperar cualquier cosa.
Crisis/Crisis
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Este blog está sufriendo en estos momentos una crisis. Me he dado cuenta de
que no tengo tiempo para un proyecto tan ambicioso como el que quería, pero
p...
Hace 16 años
9 comentarios:
¡Aggggg! ¡Y yo, con el vértigo que tengo!
No tienes ni idea de la envidia que me das, viviendo en un país donde hay tantas cosas para los nenes (y los no tan nenes).
Pero bueno (aquí tienes que poner acento pijo), la próóóóxima vez que me acerque por ahí de shopping, quedamos, ¿vale? (termina el acento pijo). :-)
Piensa que la nena puede presumir de mami; las mías no dejan de decir: "ahí mami no subió, mamá se quedó abajo..."
"Oiggg shopping, si shopping" (por shopping no me viene mucho a la cabeza, aparte de cierta casa de muebles sueca, avisa con tiempo para que pueda empollar, pero el euro esta fuerte en las Alemanias).
Y podra presumir de madre hasta que llegue la primera montaña rusa y yo cante eso que "antes muerta que en esa silla".
Que te lo pases bien en las Americas, no sabes que envidia me das.
Un supersaludo
¿Te das cuenta que nos envidiamos la una a la otra?
¿Hay alguien que entienda a los seres humanos?
Puntualizo Ju, lo que envidio son las vacaciones, que este año aparte de una semana en Julio ha sido ni catarlas, ni planearlas, ni na de na... Cuando tenga las dos cosas vacaciones y dinero quiero hacer una ruta blogera-manzanera por toda España, visitando hasta al gato... me da a mi que no va a ser pronto.
Bueno y envidio un poco tambien que tengas la presencia de saber "quedarte en casa" para tu familia... A mi es que no me sale ;)
Un supersaludo
Menuda rampa!!
Estoy con Ju en la envidia de que vivas en un país con tantas cosas para los peques ( y en otras cosas que tienen los tedescos que también me gustan) y con SW en el valor y lo que vale quedarse en casa como hace Titajú. A mi tampoco me sale, ánimo con los estudios Superwoman!!
Diana
Gracias Diana y bienvenida al blog.
Un supersaludo
Tampoco es pá tanto. Simplemente, sabes que no vas a cobrar en tu vida, pero manejas tus horarios a tu antojo (algún día, cuando las nenas crezcan espero poder hacerlo).
Ya sabes: no jefes, no aguantar a nadie, no sueldo.
SW, me gusta la lección que sacas de ir de vez en cuando cuesta abajo y sin frenos por la vida, de que hay que ser más valiente y no pensarse las cosas tanto... pero sinceramente creo que eres una persona que ha sido valiente muchas veces, porque te has ido de casa, dejando a tu familia y amigos, para conocer otros lugares y culturas, eres valiente por estar viviendo en otro país donde solo están tu marido y tus hijos, pero aún así has sido capaz de tener la valentía para empezar y desarrollar tu propia vida allí... yo creo que hay muchos tipos de valentía... admiro la tuya de ser tan "echá pa'lante", te des cuenta o no, te has tirado por muchos toboganes ya... aunque eso sí, si hablamos de montañas rusas... yo también soy de las que se quedan vigilando las mochilas ;)
Un saludo
Sw, y has sobreviviod par acontarlo. yo a estas alturas de mi vida, creo que también sería d elas que no montarías, pero...¡se ahcen tantas cosas por los hijos, bueno en micaso hija!
Oye,e s cierto eso del tour bloguero. Genial, me imagino que Coruña será parada fija porque aquí matas al menos dos pájaros de un tiro.
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