Sí, queridas, esto no es más que una trampa para atraer a esos que todavía están indecisos... la pienso repetir en todos los cambios de estación del año, que con manía y todo, esto es bonito en cualquier época de año...
* Por las hojas de colores...

En estos países en que, como dice mi amiga finlandesa, hay cuatro estaciones de verdad es impresionante la variedad de colores y tonalidades que aparecen en las hojas de otoño. Tenemos el lujo de estar situados entre varios Parques Naturales a una jornada de distancia para verlas regularmente.
* Por los Museos...

Cantidad, calidad y variedad: es la descripción de la oferta cultural alemana. A quien no le apetezca un Museo, le podemos ofrecer una Galería de Arte o un Concierto (desde el clásico más clásico hasta lo más innovador). Justo ahora antes del invierno, cuando los días se acortan y no apetece tanto estar hasta las tantas en la calle, una visita al museo resulta de lo más tentadora.
* Por el Abendbrot...

Y precisamente porque todavía apetece salir a la calle y por la tarde hay que acostarse pronto, para la cena aprovechamos una costumbre de lo más alemana: el "Abendbrot" (literalmente, pan de la tarde) consiste en apañar la cena a base de fiambre, pan y ensalada... Y no es por nada, pero los alemanes de fiambre entienden un rato y más.
Os recuerdo que sigue abierta
la competición por un achiperre (la palabra más buscada en la página de la
DRAE en todo el mes... desgraciadamente, no la han puesto en catálogo) comprado en el Striezelmarkt de Dresden. La condición para participar en el sorteo es escribir un comentario precisamente en esa entrada y no en ninguna otra. Por cierto, tengo todavía dos anónimas/os indocumentadas entre los comentarios. Para entrar en el sorteo es condición imprescindible dar al menos un nombre, que las reclamaciones a posteriori pueden ser gloriosas.