Como se puede apreciar en esta foto, nos lanzamos a la playa casi recién llegados (se nota en lo blanca que estoy y en que los siete días de buffet libre, desayuno y cena todavía no se me marcan en las cartucheras). También se puede apreciar que es cierto que no tengo nada que envidiarle a Jeniffer Love Hewitt.
Supergirl ya es lo suficientemente mayor como para apreciar los encantos de la cultura local:
Y Superboy... bueno, Superboy se entretiene con lo que buenamente va pillando (pero creo significativo que ha aprendido a decir con su media lengua "paaya" y ahora lo repite sin cesar en cuanto ve dos granos de arena juntos):
Pues eso, que hoy, enfrentada a la dura realidad que veo desde mi ventana y que os resumo por cortesia del "Saesische Zeitung":
le he preguntado a mi jefe si no existía la posibilidad del teletrabajo desde alguna islita griega... Se ha reído mucho y ha comentado que cuando abran la lista de espera, él piensa colocarse en el primer puesto.
Y mientras tanto, sólo nos queda seguir soñando con un lugar en el sol:
4 comentarios:
Uyyyy! que ganitas de playita y de solecito; que largo se me va a hacer hasta julio o agosto, que aún no lo tenemos muy claro este año.
Me ha dado mucha nostalgia mediterránea esa última foto con las contraventanas azules y los claveles coloraos, la verdad, mucha.
Joer, qué malo hace en tu Land! es muy gracioso lo que cuentas, y los superboys parecen muy calmados en las fotos, respecto a tus relatos habituales... ¿Será el sol del Mediterráneo? Abrazos y hasta pronto. Am
Ayyyyy, Marta y Maria, para nostalgia mediterránea, la mía y os remito a la entrada de hoy...
Andrés, los Supernenes dan el pego en foto que da gusto ;)... Llevo tiempo queriendo poner un mensaje en el blog, pero desde el curro no debo de tener el plugin adecuado y en casa ahora que he recuperado la Internet tengo 999 asuntos pendientes ;). De todos modos, me encantó tu piso y luego me paso a decirtelo.
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